Monday, November 26, 2018

Una Historia de Dos Mujeres

Entre el 2007 y 2010 laburé en el banco de inversión. Tendría que cambiar la primera oración, voy a intentarlo de vuelta. Entre el 2007 y 2010 asistí casi todos los días al banco de inversión y a veces trabajaba. Fue un momento especial para mí, el primer laburo desde que había vuelto de Estados Unidos, conocí mucha gente muy interesante y fue el despegue del blog. Casi todos mis compañeritos laborales me leían e incluso sé que varios siguen leyendo.

Tenía una compañerita que se llama Agustina. Me llevaba bien, era buena onda. Hablaba mucho y tenía sus cositas, pero nada muy grave. Al menos eso pensaba yo en ese momento. Un día cualquiera del laburo, creo que fue en el 2008 o 2009, no me acuerdo, Agustina se empezó sentir mal. Se mareó, dijo que se le había nublado la vista y le subía la presión de los ojos. Nuestra jefa se llamaba Inés y le faltaban muchos jugadores. Dijo "le bajó la presión, prendan el aire acondicionado". Agustina se sentó y prendieron el aire acondicionado. Entonces estaba mareada, con la vista nublada, con la presión de los ojos alta y además con frío.

Se hizo varios estudios y le detectaron un cavernoma en su cerebro. Debían operarla. Es una operación bastante simple dicen, de lo más fácil que hay dentro de lo que son las operaciones de cerebro. Ni siquiera tuvieron que cortarle el pelo, simplemente le raparon un rectangulito chiquito sobre la nunca y listo. La operación fue simple, rápida y totalmente exitosa. El post-operatorio fue reposo absoluto en su casa por varias semanas.

No me pregunten porque, pero la operación de ella me pegó bastante. No puedo explicarlo, pero me había resultado muy chocante, me afectó mucho. Durante el post-operatorio, hablaba casi todos los días por teléfono con Agustina y nuestra relación mejoró mucho. Casi de amistad, podríamos decir. Era eso y nada más, ella siempre tuvo novio y siempre hablaba mucho del novio. Hablaba mucho de todo y del novio también.

El punto de inflexión en nuestra relación fue su último viernes de reposo. Ella había salido con las amigas a festejar y me llamó a eso de las 11 de la noche borracha. Yo estaba en el laburo, en ese entonces en mi sector laburábamos de 3 de la tarde a 12 de la noche y a la vuelta nos pagaban el remise. Borracha, me dijo que quería venir a mi casa, le dije que sí. Que yo le avisaba cuando el remise estaba llegando a mi casa y nos encontrábamos ahí. Por las dudas le dije que no me esperara en la puerta, porque en el remise iba a estar algún compañerito laboral y no quería que nos vieran.

Dicho y hecho, a la hora señalada nos encontramos en mi casa. Todo el mundo sabía dónde vivía yo y todos conocían mi casa. En aquel entonces, era un gran anfitrión y prestaba mi casa para juntarnos siempre. Subimos a mi departamento. Ella estaba un poco borracha y otro poco se hacía a borracha, como hacen las mujeres cuando quieren algo muy puntual.

Entramos, ella estaba regalada. Y yo no quería. No quería por un montón de razones. La que use de excusa fue que ella me dijo que le contaba todo a su novio y sentí que me estaba usando para cortar con él. La real es mucho más simple pero que en el momento no supe manejar, es que no me gustaba. No hice nada. Ella se fue a las 5 de la mañana, igual de vestida que como había llegado, sobria y tal vez con cierta frustración o decepción.

El lunes siguiente volvió al laburo. Esa noche cenamos casi todos los compañeritos y a la 1 de la mañana me llamó por teléfono. Igual que lo había hecho casi todos los días de su post-operatorio. Acá tampoco supe manejarlo. La verdad es que veníamos de estar 9 horas de jornada laboral juntos, no tenía muchos temas que compartir.

Con el correr de las semanas empezó a haber cierta tensión. Un amigo me preguntó que pasaba y le conté. Me dijo "yo me la hubiese garchado" y le contesté "si me la garcho le va a contar al novio y no está tan buena como para que me caguen a trompadas" a lo que respondió "tenes razón" y quedó como un chiste entre nosotros dos.

Otra vez, la verdad es que no supe manejar la situación. Podría haber dicho algo buena onda como que quería que siguiésemos siendo amigos, que ella tenía novio o algo similar. Qué se yo. Después no me acuerdo con detalles que fue pasando hasta el 2010 cuando ya estaba todo para el orto. Me llevaba pésimo con la mina. Ella armó camarillas al estilo colegio primario y prácticamente no hablaba con nadie. Ella se encargó de eso y tenía sus "trucos" tan fantásticos como hacer capturas de pantalla del chat interno donde (supuestamente) yo admitía que no laburaba y cosas del estilo. Toda una estratega.

En mayo 2010 cambié de laburo y no la vi nunca más. Sé que se casó con el mismo pibe que quería dejar pero nunca pudo y al poco tiempo se divorció. Ese pibe tenía muchos problemas, pero no los voy a contar acá porque no da. Unos años más tarde, ella se fue a vivir a Estados Unidos.

La segunda chica de esta historia es Lau, quien también trabajaba en el mismo banco y siempre me pareció una fenómena. Hubo una época en que ella escribía seguido acá como blogger invitada. Voy a dejar los links acá, a mí me sigue pareciendo graciosa.

Número Mágico
– Mayo 2009

Cuando viajó a India, junte sus mails y armé un post
Living la Vida India:
Capítulo I
Capítulo II
Capítulo III

Frases 2009 – Diciembre 2009

Apocalipsis Now – Enero 2010

Apuesta Indecente – Febrero 2010

Lista Negra de Lau – Marzo 2010

Grosa o Grasa – Abril 2010

Mail de Lau – Mayo 2010

Como dije, a mí me sigue pareciendo graciosa. Por ahí a los que no la conocen, no les parece. O sacado de contexto pierde la gracia.

Si bien dejamos de trabajar juntos en el 2010, nos seguimos viendo. Cada tanto vamos a comer o al cine. No somos amigos en el sentido de que somos la primera persona que llamamos cuando tenemos un problema, ni siquiera hablamos o nos vemos tan seguido. La relación es diferente. De mí lado, es una persona que quiero y me gusta tener en mi vida y la paso bien cuando la veo, que no es poco.

Hace unos meses, Lau me contó que se iba a casar, me puse contento por ella porque es la misma que en otra época había dicho que jamás se casaría. Hace dos semanas, le pregunté a quién iba a conocer de la fiesta, me respondió que a absolutamente nadie. Creo que ya se dieron cuenta para donde está yendo la historia.

El fin de semana pasado fue el casamiento. Estábamos ahí con Flor tomando algo y, de repente, sin previo aviso ni nada, la veo a Agustina parada a pocos metros de distancia. Le miro a Flor y le digo "esa es Agustina" a lo que me contesta "no tengo ni idea quien es Agustina". Es verdad, Flor no sabía nada de todo esto.

Agustina se acerca a saludarnos mientras sonaba la música de psicosis de fondo. No en el casamiento, sino en mi cabeza. Me saluda, le presento a Flor y se puso a hablar. Sin que nadie le pregunte, contó que vive en nu-ior’k (así lo pronunció) y que vino porque también se casaba su hermana y que como no iba a venir que Lau esto, Lau lo otro, Lau lo de más allá, que mi mejor amiga Lau y que estuvo en el civil y que se hizo re amiga de Rubén (el papá de Lau) y que bueno, que la mamá de Lau no estaba porque falleció. Si, ya sé, le respondí, yo estuve en el velatorio. Me contestó decepcionada y aclaró que ella no había podido ir porque estaba viviendo en Estados Unidos. Fue todo un gran acto para mostrar que ella era más amiga de Lau que yo y me habló de su relación con cada familiar directo de Lau. Después me contó de su súper laburo en un-ior’k y derivó la competencia conmigo en el ámbito laboral.
Agustina: ¿Vos que estás haciendo?
Yo: Nada
Agustina: ¿Nada?
Yo: Nada de nada.
Agustina: ¿Cómo nada?
Yo: Nada. Me levanté hoy y vine al casamiento, no hago nada.

Con cierta frustración puso una excusa para buscar algo y se fue. Flor me preguntó si había pasado algo con ella porque la había mirado mal. Dijo que fue esas miradas de minita donde te observan hasta el más mínimo detalle, con cierta violencia ocular, si algo así existiera.

Para mí mala suerte, volvió Agustina. Yo sabía que ella tampoco conocía a nadie del casamiento y mi miedo era que se adose a Flor y a mí durante toda la fiesta. Eso estaba intentando y siguió sacando conversación.

Agustina: ¿Seguís viviendo ahí en XXX? (Dijo la calle donde vivo)
Yo: Sí.
Agustina: ¿Y qué onda?
Yo: Todo bien, aunque se achicó el departamento cuando se mudó ella. (Señalando a Flor)
Agustina (A Flor): ¿Cómo es Ale con la pérdida de espacio?

No tengo la capacidad literaria de explicarlo, pero todo esto, más toda la charla previa de su casa en Beccar, su hermana exitosa viviendo en Nordelta, su competencia de éxito laboral y amistad con Lau y todo el intento de llamar la atención, sumado al intento de molestar a Flor con ejemplos de que ella me conoce desde antes fueron muy hinchapelotas.
Flor: Lo más bien, nunca tuve ningún problema.

Agustina se fue otra vez y no la vimos por un rato largo, por suerte. Más tarde, estábamos con Flor sentados en unos sillones cuando Flor se va al baño. Veo a Agustina acercarse, esta vez sonaba la música de Tiburón de fondo. En mi cabeza, no en el casamiento. Se acerca esperando el cruce de miradas para sentarse conmigo. En un acto de lucidez, saqué el celular de mi bolsillo y me hice el que no la vi. Cuando guardé el celular, veo que se vuelve a acercar. Otra vez la música de Tiburón. Esta vez saqué las gotitas para los lentes de contacto y me las puse, mientras me quedé mirando para arriba un rato. Por suerte volvió Flor.

Un rato más tarde, apareció otra vez, aunque ahora por la espalda. No la vi venir. Nos mira a Flor y a mí y dice "¿Vienen a bailar?" y le contesto que no. Entonces le pregunta a Flor "¿Queres bailar conmigo?" y Flor responde "No, gracias" y se fue. Porque yo puedo ser un poco asqueroso, pero cuando tiene ganas, Flor me gana por mucha diferencia. No la volvimos a ver. Ojalá que pasen al menos 8 años hasta la próxima.

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Wednesday, November 21, 2018

Últimos 2 Días

Muchas gracias a todos los que compraron Espirales. En dos semanas vendí un 50% más que los dos meses de financiamiento colectivo de YaVeremos. Como dije en Empecinado en el Error, tenía mucho miedo de fracasar estrepitosamente con esto. No pasó. Ya hay suficientes libros vendidos para poder pagar la publicación. Otra vez, ¡muchas gracias!

Este viernes se cierra la pre-venta, después Espirales va a venir con inflación. Apurense y compren ahora (haciendo click acá), antes de que aumente.

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Thursday, November 8, 2018

No Vives de Likes

El 2 de Febrero de 2018 dije que quería publicar Espirales antes de fin de año. En Octubre armé todo para publicarlo con financiamiento colectivo y publiqué el primer capítulo acá, con la ilusión de que les guste y que suban las ventas.

El jueves 1 de Noviembre finalmente puse el libro a la venta y en esta primera semana ya se vendieron casi la mitad de los libros necesarios para lograr la publicación. Incluso algunos compraron YaVeremos y otro compró entradas para ver stand-up, aunque nunca va a ir a ver el show, lo hizo como donación extra y estoy muy agradecido.

Viene todo muy pero muy bien. Salvo un pequeño detalle. Pequeño. Muy muy pequeño. Casi insignificante diría. Pero sin eso, no hay Espirales. Ese detalle son ustedes. Ustedes, los que le dan "me gusta" a las publicaciones en Facebook, ustedes los que dicen "quiero un libro" pero no lo compran, ustedes los que dicen "buenísimo, avisame cuando pueda tenerlo" y no pasa nada. Ustedes son de quienes dependo y ustedes son la diferencia entre que este proyecto funcione o no funcione.

Quedan 2 semanas y falta un poquito más de la mitad. Entonces, si estabas con ganas de comprar el libro, por favor compralo ahora. Quedan 2 semanas y después se termina. O sale ahora, o no sale nunca.

Por favor hagan click acá y compren el libro, o alguna otra de las opciones que hay para comprar. Muchas gracias!

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Thursday, November 1, 2018

Se Vende: Espirales

Ya está a la venta Espirales mediante financiamiento colectivo. El tema es así, tengo que vender al menos 35 libros entre hoy y el 23 de noviembre. Con la plata de los libros ya vendidos, se manda a la editorial y alrededor del 10 de diciembre lo tengo en mi casa. Y ahí arreglamos para que te lo lleve o lo vengas a buscar.

Espirales es mi segundo libro y primera novela. YaVeremos fue una recopilación de posts. Espirales es una novela semi-autobiografica que trata la historia de un chico que vive en el exterior y vuelve a Buenos Aires por 3 semanas para pasar las fiestas. Pueden leer el primer capítulo acá.

Como el primero te lo regalo pero el resto te lo vendo, podes comprar todo el libro acá abajo. Además del libro, voy a vender acá mismo el otro libro y entradas para el show de stand-up que ayudarían a financiar la publicación de Espirales. Todas estas cosas se pueden comprar en esta misma página pagando por MercadoPago con tarjeta de crédito.

Compra Espirales por $300 haciendo click acá.

Compra YaVeremos por $250 haciendo click acá.

Compra Espirales + YaVeremos por $500 haciendo click acá.

Compra Espirales + 2 Entradas para Humor Negro por $800 haciendo click acá.

No compres el libro pero convertite en colaborador y aparece en la lista de agradecimientos del libro por $100 haciendo click acá.

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