Viene de Lo que Mata es la Humedad. El jueves 22 llegaron los Mario y Luigi (Ariel y Javier, los hermanos plomeros) a romper el piso y cambiar el caño. Y rompieron mucho. Sacaron los azulejos, cambiaron el caño en cuestión, taparon el piso con cemento y se fueron para volver al día siguiente.
Tal como prometieron, el inodoro lo dejaron provisorio y la ducha funcionando. La pregunta del millón era que pasaría con el bidet. Fácil. Lo dejaron dentro de mi placard. Desconozco quien tuvo tan brillante idea. Pero el bidet en el placard no queda tan bien como la mayoría de ustedes podría llegar a pensar.
El viernes volvieron y colocaron los azulejos del piso. Me habían prometido que iban a ser iguales a los anteriores. Por iguales, Mario y Luigi entendieron del mismo color. Aunque nadie dijo nada respecto al tamaño. A los fervientes creyentes que el tamaño no importa, les cuento que los azulejos del piso son más grandes que los de las paredes. Eso sí, son todos blancos.
El sábado y domingo fueron días de limpieza. Compre muchos Cif y con mi novia pasamos un fin de semana a todo trapo. Literal. Tuve el agrado de limpiar las huellas dactilares que Mario y Luigi fueron dejaron por las paredes entre el baño (donde ponían los azulejos) y el balcón (donde los cortaban). Tal vez pensaban que si no dejaban las huellas en el siguiente viaje se iban a perder, ni idea. Pero dejaron la casa como los Hansel y Gretel de la plomería moderna.
Limpiando el baño, con horror descubrí que el caño detrás del inodoro goteaba cada vez que apretabas el botón. Con pánico me encontré con que el caño de desagüe del lavatorio también goteaba. Este no debería gotear porque andaba bien, pero Mario y Luigi lo cambiaron. Nunca entendí porque cambiaron algo que funcionaba bien. Los llamé y quedaron en venir durante la semana siguiente a arreglar los caños y, de paso, volver a pegar el bidet al azulejo porque no quedó bien sellado. Me encanta la gente que logra solucionar un problema creando tres problemas nuevos que no existían antes. Te obligan a que añores el problema original y pienses que en realidad no estabas tan mal.
La semana pasada arreglaron lo del lavatorio e inodoro, lo del bidet queda para esta semana cuando también arreglen los huecos de la pared del dormitorio. Y, la que viene, debería venir el pintor. Si el pintor quiere, porque los gremios funcionan así. Hay que matarlos a todos.
Tuesday, September 3, 2013
Promesas sobre el Bidet
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nou coments? puteate alguna provincia
ReplyDeleteAsí parece Maty, a nadie lo importa donde guardo el bidet!
DeleteGracias por ser el único. Abrazo.