Hace poco casi muero. En realidad no me paso nada, pero casi muero. La historia es así. Resulta que una compañera de trabajo tenía una reunión de idem en una empresa de micros de larga distancia que vamos a llamar Micros S.A.
Micros S.A. es una de las compañías más grandes de viajes de larga distancia y sus oficinas se encuentran ubicadas en el mismo lugar que su garage; que es detrás de la terminal de Retiro. Para mis queridos lectores que no son de Buenos Aires y no conocen la zona, les cuento que detrás de la terminal de Retiro también está la villa 31. Como mi compañerita laboral no quería ir sola a la reunión por temas de seguridad, me pidió que la acompañara. Desconozco en que cabeza cabe que yo puedo brindar algún tipo de seguridad. Aunque una vez trabaje como seguridad en un recital de Kris Kristofferson, pero esa es otra historia. Creo que poca gente en el mundo da menos sensación de seguridad que yo. Igual, yo si me sentía seguro. Ante una emergencia, lo único que tenía que hacer era correr más rápido que mi compañera laboral.
La oficina/garage se localiza sobre la calle Gendarmería Nacional, pero no tiene número. El Gerente de Marketing nos dijo que es un edificio muy grande y lo íbamos a reconocer en seguida. Tomamos un taxi y nos bajamos en la esquina de las calles Gendarmería Nacional y Antártida Argentina. No lo reconocimos en seguida. Caminamos dos cuadras por la vereda de los edificios de Gendarmería, con guardias armados en la puerta. Yo me sentía bastante seguro.
Llegamos a una esquina y divisamos a media cuadra un cartel de Micros S.A. El problema es que era media cuadra perpendicular a Gendarmería, alejándose de los guardias armados. Con cierto temor caminamos hacia el edificio, rodeados de la fauna autóctona.
Todo lo que sigue me resulta complicado de escribir. Porque por un lado todos estamos en la obligación de ser progres y hablar que somos todos seres humanos y que está todo bien y todas esas cosas. No hay que generalizar, no por vivir en una villa la gente roba y sarasa. Pero por otro, estaba con una mina del laburo a una cuadra de una villa y las caripelas del lugar no eran las más copadas. Y había muchas. Pero muchas en serio.
Llegamos al edificio y en la puerta un señor nos pregunta que hacemos ahí. Le dijimos de la reunión, nos indica que las oficinas se encuentran dos cuadras más adelante. Volvimos para gendarmería mientras mi compañera me decía "yo me voy a la mierda, acá no me quedo ni en pedo, que los de Micros S.A. me la chupen pero yo no me voy a meter en una villa para una reunión del orto, no me pagan lo suficiente para estas cosas, no quiero tanto a la empresa" y demás frases del estilo, solo escribí algunas como para ilustrar la delicada utilización del lenguaje que hacia mi compañerita.
Ya en el edificio de gendarmería nos acercamos a una soldada, muy bonita por cierto, de ojos claros, rodete, borceguíes, fusil en la mano y pistola en la cartuchera. Le dijimos que teníamos una reunión en Micros S.A., le indicamos donde quedaba y le consultamos por nuestra seguridad. Ella nos respondió con mucha amabilidad que vayamos sin problema, pero hasta esa cuadra; que ni se nos ocurra meternos más adentro que ella no lo haría. A ver, como te lo explico, si una persona vestida de militar con una pistola y un fusil te dice que no vayas a un lugar... yo, que estoy con unos hermosos zapatos negros, pantalón de vestir y camisa; sin ninguna pistola ni fusil, ni cuchillo, ni cortaplumas, ni nada, ¿Qué debo hacer?
Juntamos coraje, seguimos caminando y llegamos a la cuadra del edificio. Difícil de explicar la geografía del lugar. Si fuera redactor de Lonely Planet, diría "pintoresco". Esa cuadra era el comienzo de la villa. Y no la zona copada, esa donde Macri pintó los frentes de colores. No, esta era más natural, toda con ladrillo a la vista, tanque de agua a la vista, interior de la vivienda a la vista y, por supuesto, antena de DirecTV a la vista. Bastante gente en la calle y muchas botellas de cerveza también en la calle. Acá es clave el relativismo cultural, porque si trasladamos las botellas al Oktoberfest, esta buenísimo. Pero en este lugar, no esta tan buenísimo.
Con cierto temor, llegamos a Micros S.A. En recepción pedimos por el señor a quien íbamos a ver y una vez que lo conocimos, nos dijo "que cagazo venir hasta acá, ¿no? Igual todo bien, casi nunca pasa nada". La palabra "casi" fue suficiente para que yo decida no volver nunca más.
Tuesday, July 10, 2012
Zona de Riesgo
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Y ahora falta relatar la otra parte! La salida de la reunión, el regreso, cómo le fue en la entrevista, (si valió la pena todo eso) si le fue bien: si va a tener que trabajar ahi y pasar todos los días por ese martirio, etc.
ReplyDeleteSomos todos iguales, todos tenemos derechos, y me da asco la frase "negros de mierda". Pero me robaron 5 veces estando en Buenos Aires, y es completamente entendible el miedo que sintieron!
Un beso
Chivi, la vuelta fue facil... caminamos un toque y ya estabamos otra vez en gendarmeria.
ReplyDeletemucho no valio la pena, al final no se hizo lo que fuimos a hacer.
posta que te robaron 5 veces?! creo que deberias darme tu billetera, claramente yo voy a hacer mejor uso que vos.
y muchas gracias por el comentario... ultimamente somos los unicos que comentamos aca! decis que nos dejaron solos? beso.
Esa maldita idea de que por ser hombres vamos a lograr que nuestra sola presencia evite que nos roben. ¿Desde cuando nos convertimos en chalecos antibalas (sin su preciosa capacidad de recibir balas)?.
ReplyDeleteNo porque ahora que vivo acá mi billetera está completamente a salvo. Ayer me llamaron para ofrecerme un seguro contra robo de carteras y me reí en la cara de la telemarketer. Le dije con una sonrisa de oreja a oreja: No, sinceramente no me sirve porque donde vivo no se roban carteras jajaja.
ReplyDeleteYo siempre firme al pie, acá estoy :)
Y sí, últimamente hay lugares jodidos; años atrás anduve por cada lugar que creo que hoy ni en pedo me metería.
ReplyDeleteEn esos sitios lo recomendable es ir de mañana temprano, cuando la mayoría de los sujetos peligrosos están reponiéndose de su última salida.
gastmun, ese maldito prejuicio que nosotros las vamos a hacer sentir seguras! no da ni un poquito eso. abrazo.
ReplyDeleteChivi, demasiado tranquilo para mi gusto!
cuando estaba viviendo en kentucky, no pasaba nada de nada... dejabas la puerta abierta y todo bien... igual las minitas se quejaban de las zonas poco iluminadas.
volviendo a lo tuyo, creo que deberian llevar a un par de personas para generar cierto temor, sino es muy lindo todo. beso.
Hugo, hay estudios sobre eso! hay una web que se llama "pungas en el subte" que dice que el dia mas seguro para viajar es el lunes, porque los pungas estan conformes con lo que afanaron el finde y descansan. abrazo.
Ante una emergencia, lo único que tenía que hacer era correr más rápido que mi compañera laboral.
ReplyDeleteJajaja me hizo acordar a algo que vi (http://9gag.com/gag/3675933)
Por otro lado, bajón que el del edificio te diga: "que cagazo venir hasta acá, ¿no?". Osea, pobre, me pongo en su lugar. Ustedes se cagaron hasta las patas un par de hora, ese señor todo el año, por varios años. Paja.
Me sentí identificada con Chivi, el otro día me llamaron si quería un seguro que era contra todo: robos, ataques, golpes en la calle, golpes en la ducha, raspones, caídas de escalera, violaciones, muerte, etc. Me sentí extremadamente cubierta.
Por las dudas, dije que no.
Beso! :)