En Diciembre de 1999 fui a Los Ángeles como participante del Work and Travel, ese programa que te dan una visa de trabajo temporal. Fui de la segunda camada que lo hizo, eran otros tiempos, otra metodología. Me fui el día que asumió De La Rua y allá el presidente era Clinton. Estaban de moda las remeras de Hard Rock, fumar habanos, CQC era un programa donde escrachaban políticos y un peso valía un dólar. Mucho más importante, éramos jóvenes.
Yo fui solo, sin conocer a absolutamente nadie. Unos 15 argentinos llegamos a Los Ángeles. Entre ellos estaban Maty, ese cordobés buena onda que comenta siempre el blog y Pablo, a quien no le gusta mucho que lo nombre por acá, aunque varias de sus anécdotas merecen ser contadas, como por ejemplo la de la Casa Loca.
Como dije antes, en el programa te dan la visa de trabajo, pero no te dan absolutamente nada más. Ni trabajo, ni vivienda, ni nada de nada. Todos llevábamos un estilo de vida tremendamente rata. Durante un mes vivimos 9 personas en 2 habitaciones de un Motel y abusábamos de los re-fill de McDonald's usando el mismo vaso durante semanas. Los miércoles comíamos de a cinco cheese-burgers de 39 centavos y los domingos las regular burgers de 29 centavos. Cuando estábamos para descorchar lujuria, comíamos en Jack in the Box, donde por 3,24 tenias un combo grande de hamburguesa completa.
Todos fuimos consiguiendo empleos temporales en el área de servicios. La mayoría trabajábamos de jueves a domingo y aprovechábamos de lunes a miércoles para poder viajar.
A través de un aviso en algún lado, Maty termino viviendo en la casa de un yanqui junto con dos chabones más. Uno de ellos, era chileno y casi inmediatamente se unió al grupo. Era un pibe divertido, inteligente, a quien le ocurrían sucesos extraños y no paraba de decir y hacer estupideces, pero que todas eran perdonadas debido a su simpatía natural.
Nunca nadie supo que estaba haciendo el chileno en Los Ángeles. Tampoco preguntamos. Pero resulta que el chileno tenía un amigo —también chileno— apodado Macha, quien estaba trabajando en un centro de ski en Connecticut. Macha tomó un avión para ir a visitar al chileno. Decidió no llevar una valija, sino que simplemente tiro su ropa en una bolsa de residuos. Macha aterrizó en Los Ángeles y todo su equipaje era una bolsa de residuos, que tenia pegada la calcomanía de despacho de American Airlines.
En Enero, Pablo, Maty, el chileno, Macha y yo decidimos aprovechar dos días libres e ir a Las Vegas. Alquilamos auto, manejamos las cuatro horas y media que separan ambas ciudades y llegamos. En la entrada a la ciudad, Pablo se encargó que en el casette suene Dos Días en la Vida. Al igual que una década más tarde entrando en Rosario, Pablo se ve obligado a musicalizar los momentos de las entradas a las ciudades.
Nos hospedamos en un motel barato y comenzamos a recorrer los casinos. En la calle principal, Las Vegas Boulevard —más conocido como Strip— hay volanteros todo el tiempo repartiendo volantes, panfletos y hasta revistas de minas semi desnudas. Nada más parecido a prostitutas. Nosotros íbamos recolectando volantes porque el hecho nos parecía muy curioso. En realidad a todos nos parecía curioso y divertido, a Pablo le despertó la imaginación.
A la tarde, Pablo empezó a insistir en que debíamos llamar a las putas. "Las Vegas es eso, es putas" decía sin cesar, buscando adeptos. Sin mucho esfuerzo, los consiguió. Maty, Macha y el chileno se sumaron a la idea, yo decidí bajarme. Putas hay en Buenos Aires, en cambio casinos como esos no. Yo preferí ir a perder mi dinero a la ruleta. Termine ganando, pero eso no viene al caso.
Pablo exploraba todas las alternativas matemáticas y geométricas posibles. Proponía contratar dos o tres minas y estar todos juntos en la habitación. No tuvo tanto quórum. Finalmente se concordó en llamar un par de minas y ver que pasaba.
Desde el estacionamiento del motel se realizó el llamado. Hay una foto que conmemora dicho momento, pero que no voy a publicar para preservar la poca anonimidad que les queda a los participantes. En el dialogo telefónico se enteraron que contra toda creencia popular, en Las Vegas la prostitución es ilegal. Ellos podían contratar bailarinas y lo que se arregle dentro de la habitación, es tema de ellos. De ahí el slogan "lo que pasa en Las Vegas, queda en Las Vegas".
Llegaron dos bailarinas bastante bonitas y comenzó el arte del regateo. Que yo cobro tanto, que no te doy, que sí, que no, que es mucho, que quiero algo más barato. El precio final fue 50 cada uno por la bailarina y 100 más para garchar. Era mucho y pidieron una opción más económica. Las chicas se fueron y al rato llego otra.
La nueva bailarina era una cosa impresentable. Fea, lo que se dice fea en serio. Al menos eso es lo que me comentaron, yo no estaba y nunca la vi. Negociaron 50 por persona. Pagaron y decidieron sacar turno e ir pasando de a uno, mientras los otros tres esperaban afuera.
El primero en pasar fue Pablo, quien menos de cinco minutos después salió de la habitación a las puteadas. Tanto preámbulo, tantas ganas, tanto Las Vegas es putas... y los minutos de la aventura se contaron con una sola mano.
El siguiente en entrar fue Macha, quien estuco cerca de 20 minutos. Luego salió feliz.
El tercero fue el chileno. A los 10 minutos salió de la habitación diciendo "huevon, que no se me para" a lo que Maty le respondió "apurate chileno de mierda que todavía falto yo". El chileno volvió a ingresar a la habitación e inicio la faena. La bailarina estaba acostada boca arriba, con las piernas abiertas, pero con el resto del cuerpo inclinado hacia un costado leyendo una de las revistas que los volanteros nos habían entregado esa misma tarde. Digamos que la chica en cuestión no estaba muy comprometida que digamos con la situación ni con sus labores. El chileno estaba acostado sobre ella realizando sus menesteres. En ese momento, sonó el teléfono de la habitación. Ese debe ser uno de los acontecimientos más extraños de la historia. Absolutamente nadie en el mundo sabía donde estábamos. Sin embargo, mientras el chileno estaba dale-que-dale, atendió. "Hello?" dijo él. Una voz del otro lado de la línea dijo algo. El chileno se alejó el tubo y se lo dio a la prostituta "it’s for you". Era la agencia que llamaba para avisarle que el turno había acabado. El chileno no.
La muchacha se levantó, se vistió en medio segundo y salió a paso rápido por la puerta. Maty alcanzó a decirle "Wait! My turn!" y ella respondió "don´t worry, another girl is coming". Eso fue en 1999; hoy en pleno 2012, estoy en condiciones de asegurarles que la chica todavía no llego.
Friday, July 27, 2012
Viva Las Vegas
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Me acabo de recontracagar de risa con este post!
ReplyDeleteGRACIAS!
Woww! Que divertido!
ReplyDeleteAunque aún no entiendo por qué aceptaron a la fea, tenían que pagarle igual si se iba sin hacer nada?
Porque total, por probar, llamaban a otra y le regateaban a ver qué pasaba, por ahí estaba más pasable!
Un beso!
Acabo de leer el post de la Casa Loca. Creo que es el mejor post del blog... todavía me estoy ríendo :)
ReplyDeleteIdem, la verdad Ale, el de la casa loca no lo habia leido.... Increiblemente gracioso!
ReplyDeleteNo podes dejar mas mal parado al chileno, jajaja, pero mas alla de eso, a mi me paso algo muuuuy similar, solo que en ves de chileno, era un colombiano, y en ves de las vegas, fue bariloche... y no voy a entrar mas en detalles, simplemente voy a decir que lo mejor que hice esa noche, fue no estar presente en la faena, jaja abrazo!
ReplyDeleteJAJAJAJAJAJJAAJA FUE GENIAL!
ReplyDeleteNo puedo creer que hayas vivido un mes a hamburguesas. No puedo. Es inhumano.
la verdad que no puedo agregar mas a la historia, literalmente fue asi... que manera de cagarnos de risa esa vuelta...
ReplyDeletey respondiendole a Ivy, no fue un mes a hamburguesas, fueron 4 meses a pura hamburguesas... y no creo que ninguno de los que estuvimos ahi se arrepienta.
Agustin Barretom un placer! Abrazo.
ReplyDeleteChivi, Las Vegas es asi... y la plata que tenian solo alcanzaba para eso.
Me alegro que te haya gustado Casa Loca, todavia estoy en duda si ponerlo en el libro o no. Beso.
Bipo, el chileno no lee esto, asi que todo bien. Conta que paso en Bariloche! Abrazo.
Ivy, Te iba a decir lo mismo que dijo Maty mas abajo, fue mucho mas de 1mes a hamburguesas. Abrazo.
Maty, ahora te reis... ese dia andabas con bastante cara de orto... Incluso, no esta en el post, pero a la mañana siguiente nos tuvimos que ir porque no soportaron mas la ciudad! Abrazo.
GROSO POST!
ReplyDeleteXoi, gracias! Beso.
ReplyDeleteHacia mucho no me reia tanto como con este post... jajaja simplemente exelente...
ReplyDeletePobre chile, lo re quemaste... Jajaja
Abrazo!
Ariel, igual el chileno no se entera! abrazo.
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